En el inmenso azul del cosmos, tu ser emerge,
como una figura suspendida entre esferas distantes,
con una mirada que abarca la inmensidad,
como si descifraras los secretos escondidos del universo.
Los astros se enredan en tus cabellos ondulantes,
mostrando un fragmento de un sueño cósmico,
donde lo desconocido y lo eterno se encuentran,
en un susurro silencioso que vibra en la oscuridad.
Azul sideral es una obra que evoca y explora los confines del cosmos a través de un rostro monumental y etéreo que, con la majestuosidad de las efigies clásicas grecorromanas, emerge de un mar de esferas flotantes.
La paleta de colores se centra en tonos fríos y metálicos, donde los azules y grises profundos dominan la escena, con una pincelada suelta que crea un efecto de movimiento y profundidad espacial.
La mirada del rostro, capturada en un estilo realista, contrasta con las formas abstractas que lo rodean, sugiriendo un viaje introspectivo y misterioso a través del espacio infinito.
Las esferas, que parecen planetas o estrellas, añaden una sensación de movimiento y expansión, invitando al espectador a contemplar el universo con una visión propia.